COMUNICADO DEL MJP CONTRA LAS SANCIONES Y LA PERSECUCIÓN DEL GOBIERNO AL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL UNIVERSITARIO
En la mañana del viernes 25 de mayo en los pasillos de varias facultades de la Universidad de Panamá la juventud consciente enardecía impetuosa de solidaridad con las luchas sociales que se producían en distintas partes del país, estaban los enfrentamientos entre indígenas Gnabe-Buklé y las unidades antimotines en Barro Blanco, la huelga de trabajadores de la CSS y la marcha docente, todo en una semana. El estudiantado decidió protestar.
De esa forma, y partiendo de una cifra que no reflejó la burguesía mediática, unos 300 a 400 estudiantes de Derecho, Humanidades, Comunicación Social, Economía, Arquitectura y otras unidades académicas del campus central, se reunieron en el Parque Hacia La Luz y salieron a las calles para expresar su descontento contra el alto costo de la vida y en solidaridad con todos los sectores que se mantenían en posición de lucha. La represión fue inmediata, produciéndose los primeros enfrentamientos en una relación completamente desigual, la policía nacional utilizó un amplio repertorio de armas que dejó un saldo de varios heridos y miles de afectados por los fuertes gases. Fueron detenidos dos estudiantes liberados el mismo día, y un grupo de estudiantes artesanos desalojado por el servicio de Protección, fue remitido al colegio y posteriormente entregado a la misma policía por el Director del plantel, tratándose de una acto ruin, absolutamente despreciable.
Aparte de algunos candados rotos que fueron colocados con el fin de impedir la protesta, todos los daños de consideración dentro del campus fueron provocados exclusivamente por la policía nacional, al bombardear sin reparo el campus central con artefactos explosivos, balas de goma (prohibidas en otras latitudes para el control de multitudes) y bombas lacrimógenas incendiarias, similares a las que fueron usadas contra los 5 jóvenes vilmente asesinados en el tutelar de menores, y que en esta ocasión produjeron un conato de incendio en la Facultad de Medicina. Además, contrario a lo publicado por algunos medios, no hubo reporte de robo por elementos externos y a diferencia de otras protestas, no se afectó ningún bien particular. En este punto la actitud de las autoridades ha sido en vez de coadyuvar a la imagen de los universitarios, la de dedicarse a proliferar falsedades para estigmatizar la protesta.
De forma sumaria, existiendo sentencia de antemano tal como las autoridades reflejaron en los medios de comunicación, además, sin pruebas concretas, y tras rechazar sin apego alguno a la ley las advertencias de inconstitucionalidad presentadas por la dirigencia, la cúpula universitaria cumpliendo órdenes de Ricardo Martinelli, impuso una gama de sanciones draconianas contra 6 dirigentes de distintos grupos estudiantiles, dos de ellos fueron expulsados por 3 años y los demás sometidos a suspensiones de un semestre, siendo estas represalias las más fuertes tomadas contra el sector estudiantil desde Noriega, lo que sin duda guarda una intrínseca relación con la estrategia del régimen de Martinelli y sus planes dictatoriales, que pasan por la ejecución a boca jarro de un fraude electoral en 2014 y la consolidación de una dictadura comercial financiera anti-nacional, de procedimientos anti-obreros, fascistoides y moldeada según el cuño personal del dictador.
Con la imposición de estas arbitrarias sanciones se busca la desarticulación del movimiento progresista y revolucionario en la universidad, aislar a su dirigencia, proliferar el terror entre los nuevos militantes, y atolondrar a las masas para que no reclamen sus derechos como estudiantes y como ciudadanos ante los abusos del poder. Quieren convertir a la Universidad de Panamá en un centro de enseñanza de educación pública acrítico por completo, al servicio así de los planes estratégicos de la ultraderecha liderada por el dictador Ricardo Martinelli.
Fracasarán. Anunciamos que las fuerzas patrióticas de la institución estamos unidas en esta lucha por la libertad, la democracia y contra el neoliberalismo, representado, dirigido y llevado a su máxima expresión despótica por la dictadura martineliana. Lucharemos contra las sanciones y nos movilizaremos de manera constante por la autonomía universitaria, la preservación del carácter crítico, y procuraremos hacer lazo común con las luchas del pueblo por mejorar su calidad de vida y proteger al país del espectro del autoritarismo, así como trabajaremos incesantemente por una alternativa obrera, popular, democrática, progresista, revolucionaria, antimperialista y patriótica que transite por la senda del socialismo.
NO A LA SANCIONES! SOLIDARIDAD CON LOS PERSEGUIDOS POLÍTICOS!
VIVA LA LUCHA DEL MOVIMIENTO POPULAR Y DE TRABAJADORES!
VIVA LA LUCHA DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL!
OBREROS, CAMPESINOS, INDÍGENAS, ASALARIADOS, DESEMPLEADOS, MUJERES, JÓVENES, JUBILADOS, PROFESIONALES Y ESTUDIANTES, PANAMEÑOS Y PANAMEÑAS DE TODAS LAS RAZAS Y CREDOS:
UNIDOS HACIA DELANTE!
PATRIA O MUERTE VENCEREMOS!
DIRECCIÓN NACIONAL DEL MOVIMIENTO DE LA JUVENTUD POPULAR REVOLUCIONARIA, MJP
